II. El Vuelo de Deskaniel

Hablan las paredes
Ya lo he dicho
no narré porqué
pues tanto lo he temido

Lo que he de contar
Usted, lector, no lo creerá
Muerte sin piedad
con tal cotidianidad

Me habia vuelto un mentiroso
El poder me hacía ventajoso
No era más que una moneda
pero ya todo cambió

Narraré como la vida
Marcharé en mis memorias
y mis ojos pasados serán presentes
Así será...

Yo me sé sobreviviente
Yo me veo del ayer
Yo subsisto sobre el tiempo
Y me sufro del recuerdo

Era octubre aquellos días
Descansaba en mi rota silla
Misterioso, abundante
como yo solía proyectarme

Las personas me temían
"El viejo vuitre" me decían
cuan feliz yo me sentía
pues terminaba ya otro día

El cielo bermellón oscuro
La luna despertaba entre los montes
y el sol ya se despedía de su gente
crepusculo tan trascendente

Aburrida era esa gente
Aburrido era ese ambiente
que me iría algun día
esa era mi teoría

Pero peor aún
La miseria me esperaba
y yo no a ella
¡Qué destino me aguardaba!

Dos ojos celestes me miraban
con sonrisas me juzgaban
"Helo aquí al viejo vuitre
lo comerán como al alpiste"

No entendía lo que venía
cerré la puerta con fuerza
"No escuches" dije
"Es tu mente otravez"

Caminé hasta el sofá
pues ahí nunca nadie va
es el trono de soledad
a él me aferro sin pensar

Mis ojos de buho esperan
la puerta sociega es falsa
Algo viene por afuera
El silencio es una perra traicionera

Mis dientes se confrontan
El miedo me ha tomado
No lo digas
Sé que lo disfrutas

Y al fin, el miedo me consumió
Un par de golpes en la puerta
y mi corazón se conmovió
cual triunfador sin su raqueta

"¿Quién es allá afuera?"
Lo dije con cautela
pero el silencio continuaba
y en paz no me dejaba

El golpeteo de nuevo
me causó gran ajetreo
"¡Dígame quién es ahora!"
Yo no esperaba a nadie

Yo no esperaba a nadie
Yo no quería a nadie
y menos a esa hora
donde el silencio contestó

"Abre ahora viejo vuitre
mi llegada tu pediste"
Y me contestó
como al ratón y su león

"¡Mentiroso ser de calumnia!
Yo odio a todos
persona no goza alguna
de mi agrado como al oro"

"Deucalión me mandó
del más allá me preguntó"
Mis oídos solo oían
de siniestras tonterías

"¿Deucalión?
Yo no conosco a ese señor
Ahora vete enviado suyo
deja lo mío y ve a lo tuyo"

"Hablas tú del oro
cual pirata sin tesoro
yo abundo en eso
con mil joyas y amuletos"

Me levanté de mi cueva
con su palabra en mi oreja
"¿Cierto es aquello que dices?
pues, con mentiras me maldices"

"Yo no conosco ese verbo
de él jamás oí hablar
y no creas que algo pretendo
yo he venido a negociar"

Caminé ahí despacio
como aquel que teme a los abismos
y se termina en sacrificios
Yo empredí aquel camino

La manija giraba
por mi mano deslizaba
y la duda me tomaba
No sabía qué me esperaba

Pero pasó
Ahí estaba él
El que antes a mí llegó
se llamaba Deskaniel

Ahí se mostraba aquel
con capullos sobre él
tan largos como el mar
oscuros de maldad

Sus ojos blancos cual nieve
destellaban en relieve
Tan malignos y desdichados
turbulentos cual pecado

"¿Cual es tu asunto?
¿De qué negocios hablas?"
Yo esperaba reacciones de rabia
Yo me creía aún tan astuto

"Sabes tú de Deskaniel
solo inventos de su ser
Yo soy aquel
al que dices conocer

de Parnaso yo he venido
y desde el cielo te he seguido"
"¿Porqué a mí?
¿Qué tarea traes en tí?"

"Ven conmigo ahora
y volemos con la aurora
con las nubes rígidas
y las piedras tan pacíficas"

"Entoces planeas tú
Caminar por el firmamento
Pasar sobre mortales
Inmortalizar ese momento"

"Toma mi mano vuitre
y desaparecerá todo lo que conociste
La realidad está en tu mente
elige lo que es y lo que no

Tu gente está ciega
no ven sus capacidades
se esconden y se encierran
en lo que llaman sus ciudades"

"¿Iremos a Parnaso
sin dejar algún recado?"
"A nadie le importas
A nadie le aportas"

De su mano salió su mano
tan calida cual la de un hermano
yo estreché la mía
con esperanza y alegría

Un poder resplandeciente
la ira de los tiempos
El pasar a trascendente
y sentirse al fin tan importante

No sé qué pasaba ahí
volamos por terrenos de Tahití
Aves nuestro lado
Montañas cual helado

"¿A qué vamos a Parnaso?"
"Estarás ahí de paso"
"¿Para qué quieres eso?"
"Será tu gran receso"

Prendió mirada y dijo
"de la vida fuí testigo
tú has sido mi elegido
te llevaré a mis castillos

Allá en Necrópolis
de los muertos la metropoli"
"¿No ibamos a Parnaso?"
"La muerte llega en atraso"

"¿Qué quieres decir?"
"La soledad vino a maldecir
una ola a Parnaso se llevó
Ayer Dios nos traicionó"