lunes, 5 de octubre de 2009

VIII. Afuera (antes del ocaso)

Según lo que creo
dormí dos horas en apogeo
lo demás de la noche me la pasé pensando
en mil objetos despierto soñando

Una ligera brisa entraba por la ventana
a lo lejos se alcanzaba a oír una campana
la luz del sol poco alumbraba
en la isla casi no daba

Hasta los pájaros se oían muertos
como si de la mañana no tuvieran aliento
Una pequeña niebla esperaba afuera
Gris era el color que allá espera

Y suena la puerta
Afuera Pirra se encuentra
"Sr Vuitre, Sr Vuitre
es hora ya de irse"

"Espérame Pirra
déjame vestirme"
Ella suspira
pero desnudo no podía irme

Ocho minutos exactos
Salí con un fino vestuario y zapatos
Pero ella me dió uno nuevo
después desayunamos huevos

"¿Dónde está Deucalión?
¿Irá él con nosotros?"
"Él caminó con los otros
a éstas horas aún duerme Deucalión"

Huevos de dodo
Animal extinto
aquí todo era distinto
el agua sabría talvez a lodo

"Allá afuera es peligroso"
Llevaríamos dos espadas
"Tú no creas que es gracioso
no te salvará ni una sola de las hadas

Las cosas aquí son diferentes
deberás ser inteligente
o tu peyejo será tragado
y por dragones serás devorado"

"¿A dónde vamos exactamente?"
Yo siempre he sido tán impaciente
"Vas a tener que ser valiente
nadaremos contra la corriente"

Tomamos las espadas y salímos
entre palmeras nos perdímos
La verde selva nos rodeaba
y con sus ojos observaba

Justo en medio del tronco estaban
los ojos de los que hablaba
veía serpientes bajar de la copa
¿Los demonios de la zona?

Las bestias se perdían en el pasto
el terreno eshalaba algo nefasto
Todo era lodo y ranas brincando
muy a lo lejos hay monos gritando

"Detrás de ése monte nos dirigimos
allá tus sentidos no serán los mismos
pues aún existen seres antiguos
seres esclavos nada benignos"

Así decía Pirra
esa perfecta mujer que siempre me mira
con sus tiernos labios suspira
con la fuerza que parece mentira

Sus cabellos castaños a los hombros
sus ojos cual miel en los tesoros
su mirada cansada experimentada
sabiduría eterna tan sagrada

Los rizos le vuelan con el viento
nunca me ha mostrado descontento
de un cuerpo viejo casi perfecto
solo pienso en tí en este momento

El infinito nos aguarda
tan añejo, tan lejano
la realidad no nos aparta
eres la mujer del nuevo hermano

Caminamos por cuatro horas
contándome memorias
de su vida y experiencias
convertidas en su ciencia

Ella portaba su espada
y una no tan larga falda
botas de piel de lagarto
un escote de arrebato

Un halcón se postró en frente
era extraño pues era conciente
sus alas abiertas de tres metros
ahí se puso a hacernos gestos

"Señora Pirra"
dijo tranquilo
"¿Acaso no ve lo que pasa?
Mire a dónde vino

Aquí se pierde el camino
Aquí no existe el destino
A partir de aquí hay rebeldes
anarquistas sin mente"

"Él es el recién llegado"
dijo sobre mí
"de quien te he contado"
algo que no comprendí

"¿De mí le has contado?
Nada de mí sabías
hasta esta noche que ha pasado
Aquí nadie me conocía"

Sentí alteración
talvez consternación
me sentí hostigado
había sido siempre espiado

"Deucalión mandó buscarte
lo oí anoche a tí explicarte
el virrey aquí eres
pero solo si tú lo quieres"

El halcón me hizo reverencia
con su ya comentada conciencia
"Volaré sobre ustedes
por si caen en sus redes"

"¡¿Qué redes?!
¿De qué diablos hablan?"
Parece que ambos ladran
entiendo más a las paredes

"Debemos acelerar el paso
volveremos antes del ocaso"
"¿Hay algo pendiente?"
"El futuro de mi gente"

El halcón ya había volado
y el firmamento atravezado
"Emprendamos el viaje
no quiero que lleguemos tarde"

Entre más caminabamos
más nos alejabamos
Y entramos en garras del pantano
el lugar de los desgraciados

Allá en mis terrenos
los seres perversos
se crean del recuerdo
de la ciencia de lo cierto

En ésta zona
no existen personas
abunda la ignorancia
y las bestias de desgracia

Aquí hay más neblina
Aullidos pos doquier
Yo me siento descender
en la tierra de la ruina

"Saben que llegamos
estémos preparados"
"¿Qué pasará?
¿Quién nos recibirá?"

Los lobos empezaron a rodearnos
sus grandes fauces admiramos
Sedientas de sangre
se avesima el desastre

"¡Pirra la humana...!!
Pensé en tí toda la mañana"
dijo el líder de todos
el que sobresale, el atroz

"Tú sabes a lo que he vuelto
en carne humana me veré envuelto
el sexo con humanos es el mejor
te haré sentir lo peor"

Lo sé, lo sé
en la duda me acosté
el lobo de lujuría me asombraba
ni pensé ni imaginaba

El lobo se levantó en dos patas
luego nos rodearon treinta y dos ratas
para no dejarnos escapar
y ver al depravado líder disfrutar

"Preparate Pirra la perra
ésta vez será peor que la guerra"
yo sabía que Pirra no quería
más no resistiría

La cabeza del lobo voló alto
para atrás las ratas dieron un salto
mi espada seguía girando
bañada en sangre y no de llanto

"Vuitre"
dijo Pirra esperanzada
"No podía permitirle
no dejaría que nadie se le acercara"

Sin su líder huyó la jauría
no volverán, lo juraría
Ahora hay que arreglar
lo que mis ojos acaban de prescenciar

"El lobo antes me violó
como un juguete me tomó"
Una lágrima escondida
una princesa está ofendida

Caminamos por una calzada de craneos
ella y yo como foraneos
el cielo siempre está gris
no sé si volveré a estar en mi país

Parecía un campo nuclear
anhelo algún día despertar
No sabía ni qué preguntar
a dónde todo ésto irá a parar

"Quiero que veas algo
que sé que nunca volverás a ver
Allá cerca del lago
no lo llegarás a creer"

Un oasis en el infierno
me sostuve en una roca en silencio
un arcoiris inmenso a lo lejos
un paraíso sacado de sueños

Mil unicornios bañándose
Algunos apareandose
libres de la humanidad
que los ataría sin tenerles piedad

Irradiaban felicidad
Blanca hermosa ciudad
las aguas cristalinas
las nubes bailarinas

Utópica escena
perfecta belleza
y con Pirra ahí
en los pastos caí

Me hundía como en sábanas
su mano me acariciaba
El éxtasis en el que me encontraba
a esa mujer no pienso más que amarla

Un movimiento improvisado
para los ojos despistados
sus labios en los míos
la pena en el olvido

Las lenguas enredadas
en el limbo ahí atrapadas
su cuerpo sobre el mío
de mi Angy me despido

Mis manos en sus pechos
bajo el rosado y blando cielo
mi lengua recorrió su cuerpo
de extremo a extremo

¡Qué sabor de piel!
Solo gozo ahí encontré
su monte de venus...
Placeres eternos

Con mis dientes arranqué sus muslos
después me perdí en lo profundo
llegué a lugares ocultos
hoy me siento aún astuto

Dos horas inmensas
historia a mitos propensa
el interminable sollozar
nunca debió de haber final

Pero acabó
Mi estructura sí se cansó
pareceré otro perdedor
pero yo me siento ganador

Nos levantamos con el grito del halcón
pues con éste algo nos avisó
las nubes oscurecían
el poniente resplandecía

El cielo ensangrentado
el momento menos esperado
un buho nos avisaba
que la tarde se asfixiaba

Ojos brillantes en árboles
despiertan los peores animales
teme a las sombras
y dime que aún oras

Las nubes moviéndose con frío
los pastos humedecidos
mis músculos entumecidos
Aquí comienza el verdadero desafío

Las espadas gritan por mi miedo
Morirse ése es su deseo
Siento mi carne como de gallina
lo siento sin saber qué se avesima

Es cuando voy a comprobar
El pavor que en sus ojos va a notar
sus manos apretadas con fuerza
preparaos para usar vuestra destreza

"Es hora
lo que el viento rumora
está por empezar
preparaos para pelear"

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